El cuidado de tus brochas

El día que vayas a comprarte tu primer set de brochas de calidad comprenderás la importancia de cuidarlas y mantenerlas en perfecto estado. Son bastante caras. Y aunque se recomienda lavar cada brocha después de usarla, lo más lógico es que si te maquillas a diario y solo tienes un juego de pinceles, no tengas tiempo de hacerlo. Nos conformaremos con hacerlo una o dos veces al mes.

Las brochas acumulan los aceites de los productos, el sebo y las impurezas de la piel y otros restos de suciedad que acortan la vida de nuestros pinceles y pueden causarnos problemas en el cutis.

¿Cómo se limpian las brochas?

1. Lo primero que puedes hacer es desinfectar tus brochas con alcohol. Introduce las puntas de las brochas en un recipiente con agua y alcohol y las dejes reposar un rato. Las brochas teñirán el agua y soltaran el producto.

Debes tener cuidado de no mojar la parte en que la virola se une con el mango, porque es la que lleva el pegamento que sujeta ambas partes.

2. Para la limpieza habitual puedes usar cualquier tipo de jabón suave, pasando por los jabones específicos que se comercializan para limpiar brochas.

3. Utiliza un guante rugoso de silicona o cualquier superficie similar. Aplica una gota de jabón en la superficie, moja el pelo de la brocha con agua y frótalo suavemente dibujando círculos con la punta. Conseguirás hacer espuma y retirar la suciedad acumulada en la brocha.
4. Para secar las brochas lo mejor es dejarlas en horizontal, en un lugar ventilado y bien separadas.

Limpieza según material

Puedes emplear cualquier guante de baño que te permita hacer espuma para que la limpieza de las brochas te resulte cómoda. Puedes frotar la brocha contra la palma de la mano, aunque te llevará más tiempo y gastarás más jabón.

Hay dos tipo de brochas en función del tipo de pelo: natural o sintético. Las primeras se usan para aplicar y manejar productos en polvo porque son más suaves y lo distribuyen mejor. Las sintéticas son ideales para los productos fluidos o en crema.

En el caso de las brochas de pelo sintético, límpialas primero con aceite de oliva o cualquier otro aceite desmaquillante. Conseguirás eliminar la mayor parte del maquillaje acumulado en el pelo y te quedará darle una segunda pasada con jabón y agua tibia.

Consejos para conservar las brochas

1. No ejercer demasiada presión al lavarlas, para no deformar el pelo. Coloca las brochas bajo el grifo siempre con el pelo hacia abajo. 2. Guárdalas siempre en un lugar seco en el que permanezcan aireadas. Que no reciban presión 3. Si las lavas o se humedecen, ponlas a secar en horizontal o colgadas boca abajo. 4. Utiliza fundas especiales para brochas para que el pelo no se deforme. 5. Lava tus brochas cada semana o cada quince días. Así te darán mejores resultados en la aplicación de productos y evitarás problemas en el cutis.