Solo las personas con pieles sensibles saben lo difícil que es
acertar con el maquillaje ideal. Unos resecan, otros dan brillos, otros
irritan la piel.
Si sueles tener problemas de enrojecimiento y notas que tu
piel reacciona con facilidad al contacto, el roce, el frío o el calor,
toma nota de estos consejos:
Hidratación adecuada: hidratar el cutis es fundamental para evitar los brotes. Para ello, utiliza productos apropiados para tu tipo de cutis y que sean tolerantes con las
pieles sensible.
Es importante que le dediques el tiempo necesario a este primer paso,
para que los principios activos de la crema puedan actuar sobre la piel
antes de aplicar la base de maquillaje.
Aplicar un corrector o un primer color verde: Asegúrate de usar
correctores apropiados para pieles sensibles para evitar irritaciones.
En el caso del corrector, aplícalo con un pincel o con los dedos sobre las áreas enrojecidas. La prebase
se aplica por todo el rostro para uniformizar el tono y ocultar las
zonas irritadas propias de las pieles sensibles.
Maquillaje para pieles sensibles: Escoge siempre
bases hipoalergénicas y
de alta tolerancia. Son para pieles sensibles. Proporcionan gran poder corrector sin ser espesas y son
fáciles de aplicar. Es más apropiado optar por fórmulas fluidas que
compactas, a fin de evitar irritación y enrojecimiento.
Herramientas para aplicar el maquillaje: Lo ideal
es que apliquemos el maquillaje con una esponja humedecida o con las
yemas de los dedos. También resulta apropiado emplear una brocha tipo
mofeta con el pelo muy suave.
Sellar el maquillaje: Sella el maquillaje con una fina
capa de polvos traslúcidos o con color con fórmula hipoalergénica.
Culmina el
maquillaje rociando agua termal sobre todo el rostro y no olvides
llevarla contigo para refrescar tu tez y aliviar el posible
enrojecimiento causado por el frío o el calor. También te aliviarán en
caso de sentir sequedad en alguna parte del rostro.
Limpieza del maquillaje: elimina cada noche antes
de acostarte el maquillaje de la forma más inocua posible para tu piel.
Trata de evitar el contacto directo con el agua para no resecar en exceso el cutis ni alterarlo por el contacto con el frío o el calor.
Limpia también tus brochas y esponjas de maquillaje
al menos una vez por semana. En lo que respecta a las pieles sensibles, cualquier
alteración puede causar una llamativa irritación cutánea.
Por último, si tienes la piel sensible debes poner atención no solo a
la formulación de la base de maquillaje y los polvos que utilices.
Sombras de ojos, láices, labiales y máscaras de pestañas también deben
tener una alta tolerancia a la piel sensible.
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